Título: Duelo de
espadas
Saga: Duelo de
espadas (1/?)
Autor: Lucía
González Lavado
Género: Aventura
fantástica
Publicado el 17 de Enero de 2013 por la editorial Destino
Tapa blanda con solapas
Páginas: 365
ISBN:
9788408038139
Sinopsis:
Hubo un tiempo, en las tierras de Isleen, en que la magia blanca fluía como una energía positiva y vital; pero la ambición y la codicia la corrompieron, transformándola en magia negra. Ahora un duelo está a punto de empezar.
Los destinos de dos heroínas, van, irremediablemente, a cruzarse: Leah Rowen, princesa de Sadira, tiene el don de la premonición y sabe que muy pronto el mal se apoderará de todo aquellos que conoce. También del apuesto muchacho que está a punto de llegar.
Brianne Lockheart, descendiente de una gran familia de cazadores de espectros,
lleva años preparándose para la gran guerra. Lo que no había previsto era que su gran amor sea también su mayor adversario.
¡Afilad vuestras armas, preparad vuestras flechas! El duelo de espadas ha comenzado.
Hubo un tiempo, en las tierras de Isleen, en que la magia blanca fluía como una energía positiva y vital; pero la ambición y la codicia la corrompieron, transformándola en magia negra. Ahora un duelo está a punto de empezar.
Los destinos de dos heroínas, van, irremediablemente, a cruzarse: Leah Rowen, princesa de Sadira, tiene el don de la premonición y sabe que muy pronto el mal se apoderará de todo aquellos que conoce. También del apuesto muchacho que está a punto de llegar.
Brianne Lockheart, descendiente de una gran familia de cazadores de espectros,
lleva años preparándose para la gran guerra. Lo que no había previsto era que su gran amor sea también su mayor adversario.
¡Afilad vuestras armas, preparad vuestras flechas! El duelo de espadas ha comenzado.
Opinión personal:
De este libro, lo primero que a cualquiera le llama la atención es la maravillosa portada de Cris Ortega (¡Fan!) y gracias a ella nos resulta más fácil imaginarnos a los cuatro protagonistas de la historia, sobre quienes os hablaré un poco más adelante.
De este libro, lo primero que a cualquiera le llama la atención es la maravillosa portada de Cris Ortega (¡Fan!) y gracias a ella nos resulta más fácil imaginarnos a los cuatro protagonistas de la historia, sobre quienes os hablaré un poco más adelante.
Tras leer la sinopsis lo que me
echaba un poco para atrás era la aterradora certeza de que no solo iba a tener
una parejita más que cantada en la historia, ¡sino dos! (y yo detesto bastante
esa clase de cosas). De todos modos, me arriesgué. Me apetecía probar a leer a
alguna autora española de fantasía y he salido contenta de la experiencia.
Primera advertencia de todas: Lucía
es una autora dada a las sagas, no seáis como yo que, alegre y feliz, creía que
iba a ser autoconclusivo. JA JA JA. Ahora tengo que esperar la continuación.
Lo primero que encontramos al
abrir el libro son 5 páginitas con todos los personajes de la historia
recogidos y un mapa. Me encantan los libros con mapa (instértese carita sonriente).
Aunque creo que la lista de personajes no era del todo necesaria ya que no son
tantos, esto no es Canción de Hielo y
Fuego ni mucho menos. (Cuando en algún lugar leí que clasificaban Duelo de espadas como novela río me emocioné
y… lo siento, fueras quien fueras, pero para mí no es río.)
El primer capítulo, la
introducción de Leah, la princesa de Sadira, tenemos la primera bomba: la
premonición de lo que va a pasar en unos meses. Fue un comienzo que me gustó
bastante, tenía fuerza y oscuridad y muerte y esa clase de cosas que a mí me
atraen de las novelas. Me metí en el duelo de espadas.
Mapa de Isleen |
Todos los personajes tienen
secretos. Y Maka approves it.
Pero… Desde luego lo que peor he
llevado de esta historia son los cuatro personajes protagonistas. Puede que
Brianne fuera la única de los cuatro a la que salvaría si me dijeran que van a
tirarlos por un precipicio, ¡pero juro que esto que digo tiene lógica!
Leah peca de confiada, Declan no
sé cómo lo hace para ser un stalker si se supone que no podía salir del lugar
donde estaba (y decidme vosotros si alguien puede seguir enamorado de una niña
de la infancia durante años) y Ryder… hay un momento suyo en particular que me
hizo detestarle por siempre por su falta de cordura:
"Divertido, se acercó a ella, tomó asiento a su derecha, y en ese
momento la princesa desvió su mirada hacia él. Y aunque en ocasiones le había
parecido preciosa, además de poseer unos ojos hipnóticos, en ese instante algo
había cambiado en ella. Estaba diferente y le gustó. Un sentimiento que le
asustó bastante, ya que lo último que deseaba era encariñarse con ella…, y
mucho menos enamorarse."
(Y tan solo 25 líneas
después)
"Estaba decidido. Hacía mucho que deseaba besarla y Leah no parecía
incómoda."
Yo no digo nada y con eso lo digo
todo.
Al menos, las escenas "amorosas" no me han empalagado nada.
Otra cosa que no me ha gustado es
que todos los personajes jóvenes que parecen son guapos. Todos, sin excepción.
Debe ser cosa de Isleen, que la belleza flota en el ambiente. Eso (tal vez sea
solo cosa mía y de mis manías) le resta credibilidad.
De todos modos, el modo de
escribir de Lucía me ha gustado y en ciertos momentos llenos de magia me sentía
casi como si estuviera de nuevo en Idhún.
En Duelo de espadas encontramos dríades, ondinas y napeas que nos
sumergen en la parte más “floral”, por decirlo de algún modo, de la historia, y
a los Sangre Espectral, a las
sombras, los espectros y el ejército de Los
Invisibles para darle el toque oscuro y peligroso.
Los capítulos alternos de Brianne
y Leah, junto con la acción casi incesante y las traiciones de algunos de los
personajes, impulsan a continuar la lectura hasta desenredar toda la trama de
secretos ocultos en la magia y en el pasado de Isleen. La amenaza de Los Invisibles se va abriendo paso y el
generador de todo este caos es el personaje que más me intriga de todos y sobre
el que espero que aparezcan más cosas en la continuación de esta historia tan
fantástica.
Como regalito final, os dejo una de las muchas fantásticas imágenes de Cris Ortega y dos portadas de libros echas por ella (de dos libros que tengo pendientes por leer, por cierto):
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